El CV Sestao busca seguir con su buena racha en Extremadura
El CV Sestao visitará el sábado al Extremadura Arroyo en Pabellón Municipal de Arroyo de la Luz (18.00 horas) con el claro objetivo de mantener su excelente racha de resultados. Las verdinegras han encadenado tres victorias consecutivas que les colocan en una cómoda séptima plaza, a solo un punto de su próximo rival. El estado de ánimo y de juego de las jugadoras de Paki Blanco es óptimo para tratar de dar la sorpresa ante un rival que, al menos en este comienzo, está lejos del excelente nivel de la pasada campaña.
El Extremadura Arroyo logró el ascenso a la Liga Iberdrola, pero se vio obligado a renunciar por falta de apoyos económicos. Con un equipo, como el sestaoarra, basado en las jugadoras de casa las cacereñas llegan a esta cita después de perder con claridad en Leganés, una pista en la que el CV Sestao venció hace apenas tres semanas.
“He visto ese partido y no me pareció el Arroyo de la pasada temporada. Quizás haya sido algo puntual. Nosotras seguimos con nuestro objetivo de seguir sumando. No tenemos la presión de vernos abajo en la clasificación y eso nos da más seguridad. Además, las victorias y nuestro juego no solo tienen ya efecto en nosotras sino también de las rivales. Nos hemos ganado el respeto y la entrada a la cancha es diferente”, explica la entrenadora del conjunto vizcaíno.
La última victoria, en La Benedicta ante el Arona Tenerife, ha supuesto una importante inyección de optimismo. Las verdinegras superaron varios momentos delicados para llevarse tres puntos vitales. “Las jugadoras han asumido que trabajamos bien y que cuando hay cambios en el juego puede haber momentos de incertidumbre. Salimos con mucha ansiedad y hasta que la controlamos sufrimos. Hubo un momento de bajón en el que las más veteranas tiraron del equipo y lo superamos”, destaca.
Este partido en Arroyo de la Luz será una cita especial para María Larrakoetxea. La colocadora bilbaína regresará a la que fue su casa durante dos temporadas, entre 2012 y 2014, para enfrentarse a un equipo con el que logró el ascenso y jugó una campaña en la máxima categoría.
